Desde el tradicional “no vuelvo a beber” a los remedios caseros para curar la resaca, todo lo que se relacione a las bebidas puede ser real o formar parte del imaginario popular. Si quieres saber qué hay de verdadero en cada uno de los mitos y curiosidades sobre el alcohol y la borrachera, no dudes en leer esta nota.
Preguntas sobre beber alcohol y emborracharse
¿Es recomendable comer algo al levantarse después de irnos de copas? ¿Es verdad que el queso o el aceite reducen los efectos del alcohol? ¿Conviene ser abstemio o acostumbrar el cuerpo a beber? ¿Consumir alcohol mata a las neuronas? ¿qué es “saber beber bien”?
Son muchos los interrogantes en relación al alcohol y en la mayoría de los casos, no tenemos una respuesta certera al respecto. Sólo podemos saber si sirve o no un remedio si lo probamos, ya que no todos somos iguales y quizás lo que funciona para uno no es bueno para otro.
Mitos y verdades sobre el alcohol y la borrachera
No hace falta beber para emborracharse
A veces, el cuerpo necesita pensar que está borracho para comportarse de cierta manera, por ejemplo, para actuar de manera deshinibida. Varios experimentos han probado esto, haciendo que algunas personas beban por ejemplo cerveza sin alcohol sin saberlo. Y actuaban como si realmente estuvieran borrachos. Es que el “efecto placebo” es mucho más fuerte de lo que se cree, ya que logra que el cerebro se crea ciertas cosas que no son ciertas.
Beber no combate el frío
Seguro conocerás la historia de los perros San Bernardo que en Suiza se pasean con un barril de alcohol en el cuello para que al momento de rescatar a alguien de los Alpes “entre en calor”. Sin embargo, el alcohol lo que logra es tener una sensación de calor, no nos calienta de verdad. Esto se debe a que se produce una vasodilatación de la piel, por ello en seguida nos ruborizamos. Así que, los amigos de Siberia bebiendo vodka sin ropa por la nieve, deben saber que es todo una ilusión.
En América se consume más alcohol
Las estadísticas indican que el continente donde el consumo de alcohol es mayor es América. El promedio en los 35 países que lo conforman es de 8,5 litros de alcohol puro por año. La media en los demás continentes es de 6 litros. Las bebidas alcohólicas se relacionan a mayor atención en los hospitales públicos, ausencias en el trabajo, violencia doméstica, suicidios, accidentes de tránsito, riñas callejeras, etc.
El color de la bebida si importa
Si deseas beber unas copas pero no emborracharte, es preciso que no mezcles las bebidas, es decir, que te mantengas siempre con la misma. Un “juego” para saber cómo te levantarás al otro día tiene que ver con el color de lo que hay en el vaso. Se dice que cuánto más oscuro sea el tono, peor te sentirás después. Esto se debe a los congéneres, un componente de muchas bebidas. Haciendo un orden descendiente de los síntomas de la resaca sería: cognac, vino, ron, whisky, ginebra, vodka.
El término médico para resaca es “veisalgia”
Según el país, puede recibir el apodo de cruda, resaca, guayabo, hangover o Futsu-ka-yoi. Pero en la medicina, la palabra usada proviene del noruego “kveis” que quiere decir intranquilidad y del griego “algia” que significa dolor. Los investigadores del Imperial College en Londres están trabajando para conseguir una bebida alcohólica que no genere resaca al otro día, aunque si tiene la misma sensación de embriaguez. Y el efecto de la borrachera se podría eliminar con un antídoto.
La mayor parte del alcohol se metaboliza en el hígado
Esto es cierto, por ello es que aquellos que beben mucho tienen problemas hepáticos. Lo que si es falso es el hecho de salir a correr para poder sudar el etanol que hemos bebido. No importa cuán abrigado estés ni la carga del ejercicio, sólo te servirá para eliminar un 10% del alcohol a través de los poros. El resto, aunque no lo quieras, pasará indefectiblemente por tu hígado. Por ello tampoco sirven algunos remedios caseros para no emborracharse como ser comer yogur o aceite. Y menos desayunar con cerveza o sumo de tomate para eliminar la resaca al otro día. Deja que el hígado haga su trabajo tranquilo pero tampoco te excedas en las horas extras que deberá hacer este órgano vital.
Beber no sirve para olvidar
Seguramente hayas intentando alguna vez emborracharte para olvidar un amor, para dejar de tener noción de los problemas económicos o cualquier otra razón. Sin embargo, el efecto de las bebidas alcohólicas es totalmente opuesto. Así es, ya que estimula ciertas áreas del cerebro que se encargan de los recuerdos y el aprendizaje. Seguramente hayas terminado llorando en la mesa de un bar por esa chica que te ha dejado o por un amor no correspondido, exactamente lo contrario a lo que querías lograr.
No se mueren las neuronas cuando bebemos
Lo que en realidad ocurre es que la sinapsis que hacen entre sí, se ve un poco afectada por el alcohol, pero sólo cuando es en exceso y por un periodo prolongado. Al día siguiente de beber un poco, tu mente volverá a la normalidad, y la cantidad de neuronas estará intacta. Así que, en eso no debes preocuparte.
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