La miel es un ingrediente lleno de propiedades para la salud que desde la antigüedad ha sido la base de muchos tratamientos para aliviar diferentes problemas de salud. Además de esto, este ingrediente es considerado como el edulcorante más sano que podemos encontrar y es un excelente aliado de la belleza.
Son sorprendentes todos los beneficios que la miel tiene, tanto para la piel como para el cabello; por sus propiedades funciona como un hidratante natural, combate el envejecimiento, combate las bacterias, elimina las células muertas, entre otros.
Mascarilla humectante
La miel es uno de los mejores ingredientes para hidratar la piel naturalmentey durante mucho tiempo. Es ideal para aquellas personas que sufren de resequedad en su piel y desean lucir una piel más suave y tersa.
¿Cómo hacerlo?
Limpia muy bien la piel y esparce sobre ella una cucharada de miel haciendo suaves masajes circulares. Deja actuar de 15 a 20 minutos y enjuaga con agua tibia.
Limpiador de poros
Las enzimas de la miel pura ayudan a limpiar profundamente la piel y aclara naturalmente los poros. Este ingrediente combinado con aceite de jojoba o de coco, es ideal para mantener la piel libre de bacterias que pueden conducir a desequilibrios de la piel y erupciones.
¿Cómo hacerlo?
En un recipiente mezcla una cucharada de miel cruda con dos cucharadas de aceite de jojoba o de aceite de coco hasta que los ingredientes estén bien integrados. Una vez esté listo, aplícalo sobre la piel limpia y seca, haciendo masajes circulares evitando el área de los ojos. Deja actuar 15 minutos y enjuaga con agua tibia.
Exfoliante suave
La miel está cargada de antioxidantes, enzimas y otros nutrientes que nutren, limpian e hidratan profundamente la piel. Este ingrediente combinado con un poco de bicarbonato de sodio forman un exfoliante natural muy efectivo que elimina las células muertas de la piel y permite que las células nuevas surjan para un cutis radiante.
¿Cómo hacerlo?
En un recipiente mezcla dos cucharadas de miel con una cucharada de bicarbonato de sodio y revuelve bien para integrar los dos ingredientes. Lava el rostro con un poco de agua tibia y frota suavemente el exfoliante en el rostro haciendo suaves masajes circulares.
Atenuar las cicatrices
La miel tiene propiedades antiinflamatorias y antibacterianas que ayudan a disminuir la apariencia de las cicatrices y aumentar la curación y la regeneración de tejidos. Por sus propiedades hidratantes, este ingrediente revitaliza las células de la piel y favorece su recuperación para disminuir la apariencia de las cicatrices.
¿Cómo hacerlo?
Mezcle en un recipiente una cucharadita de miel cruda con una cucharadita de aceite de coco o aceite de oliva. Una vez los ingredientes estén bien integrados, aplícalo sobre la zona afectada de la piel y realiza suaves masajes circulares con la yema de los dedos durante 2 o 3 minutos.
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